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Aprender a bajar el ritmo es algo que práctico constantemente. Me tengo que recordar todo el tiempo que mi cuerpo necesita parar.

Mi mente frenética quiere seguirle con mil actividades, mil ideas, mil proyectos, mil quehaceres, sin embargo hay momentos en donde mi cuerpo quiere y pide un descanso.

Agendar 10 minutos al día al menos, para parar totalmente mis actividades me ha ayudado a incrementar mi productividad y mi creatividad. Todo esto tiene un impacto positivo en mi sistema nervioso, estoy de mejor humor y más tolerante con mi seres queridos.

Mucho de lo que enseño a mujeres, profesionistas, madres, es aprender a PARAR. Aprender a DETENERNOS, no hay que correr todo el tiempo, de repente se hace hábito, de repente parece que es lo único que sabemos hacer, parece que no hay otra forma de vivir.

Con mucho cariño, con mucha compasión podemos empezar a introducir en nuestros días 10 minutos, con reloj en mano.

Detenernos y no hacer nada, solo estar sentadas o recostadas. 10 minutos parece imposible, te reto a intentarlo.

¿Cuéntame cómo te va?
¿Qué retos encuentras?

Con cariño
Ana Haro
anaharo.com
Salud Emocional para Mujeres y Niños

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Learning to slow down is something that I practice constantly. I have to remind myself all the time that my body needs to stop. My frantic mind wants to keep up with all the activities, all the ideas, and all the tasks, however there are times when my body wants and asks for a break.

Scheduling at least 10 minutes a day to completely stop my activities has helped me increase my productivity and creativity. All of this has a positive impact on my nervous system, I am in a better mood and more tolerant with my loved ones.

With much affection with much compassion we can begin to introduce 10 minutes into our days, watch in hand. Stop and do nothing, just sit or lie down. 10 minutes seems impossible, I dare you to try.

Tell me how are you doing?
What challenges do you find?

With love
Ana Haro
anaharo.com
Emotional Health for Women and Children