Me cuido yo, para poder cuidar de otros…
El 2018 fue el año que me “obligó” a entender esta frase. A de verdad practicarla, no solo lógicamente procesarla.
Es todo un arte, para mí cuidarme. Porque no estaba acostumbrada a escuchar a mi cuerpo.
Si eres una mamá con un bebé de meses, o una mamá que como yo está todo el día, todo el tiempo con sus hijos es normal que de repente TÚ pases a segundo plano.
Con mucha compasión entiende tu situación, tu hoy, y en la medida de tus posibilidades haz cambios que te beneficien a ti. Que te den espacios para recargar “pila” lo que sea que te nutra el alma y te motive.
Una mamá en armonía funciona mejor que una mamá ansiosa. Situaciones difíciles va a ver siempre, y las enfrentamos mejor si estamos bien con nosotras mismas.
Digo que es un arte, porque me ha costado entender qué es lo que necesito?: más tiempo para mí, para hacer lo que me gusta, o tal vez descansar, o tal vez hacer ejercicio (camino en las mañanas), pero he descubierto una necesidad de hacer yoga, de regresar a ella. Hacer algo divertido, toque piano muchos años y me gustaría retomarlo… en fin. Me ha costado mucho descifrar que es lo que necesito. Ha sido y sigue siendo todo un reto autoconocerme.
Precisamente por eso este año, lo estoy dedicando a ayudarte a ti a conectar contigo, a entenderte, a escucharte mejor. Al ayudarte a ti, me ayudo yo. Y al ayudarme yo, te ayudo a ti. El círculo se cierra 😉
El ruido del mundo exterior, las prisas, los “compromisos” pueden ser abrumadores si no conectamos con lo que de verdad importa. Si no nos nutrimos en alma y cuerpo. Por eso mis talleres, mis cursos, para mí son un gozo, son espacios hermosos para compartir, para descansar en la respiración a través de la meditación, para conectar con nosotras.
Te invito a hacer consciencia de lo que haces hoy por ti, qué te nutre el alma?, cómo conectas contigo?, qué buscas en esta vida?, qué te inspira?, qué te apasiona?. Siéntate con estas preguntas y escríbelas en un diario. No te apresures a contestar, solo contémplalas por un rato. Observa que viene a ti. Experimenta con estas preguntas.
Con cariño
Ana Haro
anaharo.com